La electricidad es, a la vez, la protagonista de la sociedad moderna y una de las causas de siniestros que año a año se cobra vidas en todo nuestro país. La concientización es fundamental para lograr un cambio significativo.
APSE tiene como objetivo promover el uso seguro y eficiente de la energía eléctrica, cooperando con las autoridades competentes para establecer mecanismos de control de las instalaciones eléctricas tanto domiciliarias como comerciales. Así, los sistemas de control se vuelven fundamentales para asegurar a los usuarios la minimización de los riesgos que conlleva el uso de energía y permitirían garantizar el cumplimiento de las condiciones de seguridad de cada instalación, evitando así grandes pérdidas económicas y humanas.
Actualmente en nuestro país, existen disímiles reglamentos en materia de seguridad eléctrica dictados por cada provincia, municipalidad o jurisdicción que muchas veces, incluso, difieren entre sí. Esta situación, da cuenta de un panorama reglamentario desactualizado y, falto de homogeneidad.
Dicha falta de criterios unificados y, particularmente, de control efectivo de las instalaciones eléctricas, conlleva a la imposibilidad de asegurar las condiciones mínimas de seguridad -establecidas por las reglamentaciones de la Asociación Electrotécnica Argentina (AEA)-, originando, como consecuencia, un incremento de siniestros de origen eléctrico (muertes por electrocución, incendios de origen eléctrico, heridos por descargas eléctricas). Además, esto se traduce en un incremento de la comercialización de materiales eléctricos no certificados que, no sólo provocan siniestros, sino que desvirtúan el marco para la competencia leal.
Subsidiariamente, una instalación que no cumple con la Reglamentación de la AEA, además de insegura, es energéticamente ineficiente, siendo, en consecuencia, un pilar para el uso eficiente de la energía eléctrica que las instalaciones cumplan con todas las reglas de seguridad.
La seguridad eléctrica, sin embargo, no se agota en el diseño, ejecución de instalaciones y uso de artefactos respetando las normas, los usuarios de energía también deben asumir un rol activo tomando recaudos para evitar siniestros. Así, como usuarios podemos: recurrir siempre a profesionales electricistas competentes para las tareas de proyectar, construir y ampliar las instalaciones eléctricas de los inmuebles respetando las reglamentaciones sobre Instalaciones de AEA; emplear aparatos y artefactos que cumplan con los Requisitos Esenciales de Seguridad, según lo establece la Resolución de la Secretaría de Comercio N° 169/2018; no permitir reparar instalaciones eléctricas y artefactos antirreglamentariamente, empleando materiales que no cumplan con las disposiciones respectivas; hacer que un profesional electricista controle periódicamente, en lapsos no superiores a los 3 años, que las características originales de seguridad de las instalaciones y de los materiales, aparatos y artefactos eléctricos permanecen inalterables.
La toma real de conciencia del riesgo eléctrico es el primer paso para avanzar hacia una sociedad que tenga a la seguridad eléctrica como uno de los pilares de su bienestar, sostenido por el sector eléctrico en su conjunto, involucrando a cada uno de sus actores.
